Lalaralaa!!

Siempre he sido un antisocial, mis amigos, simpre han sido (como lo diria Hak) "De la cultura de la anticultura". O al menos así lo fue hasta hace unos años, en que sólo somos raros para como es el mundo.
Siempre he pensado que tengo madera para cantar, desde que a los 7 años me invitaron a un coro del Conservatorio Nal. de Música. Pero hasta hace medio año no había podido afrontar mi sueño de cantar (dejar de hacerlo sólo para mi o mis artos amigos).
Entré al Coro "Ars Iovialis" de mi Facultad. El cual tiene un estilo muy sobrio: se canta música sacra (Aleluyia, salmos, etc), clasica (mozart, etc) y alguna que otra romántica o pagana.
Mucha de la música que cantabamos ahí me gustaba, pero me faltaba algo, un poco más de alegría supongo. La música romántica que cantábamos era como "Madrigal", de un frances apellidado Foure; y la pagana eran obras que hablaban del amor en los siglos XIV al XVII, de ahí lo pagano, en esa época solo se cantaba a Dios. Cuando cantábamos algo mas contemporaneo, siempre tenía que ser un arreglo coral, cómo "hijo de la luna" de Mecano, donde una contralto (voz grave de las mujeres) cantaba la letra mientras todo el coro hacia de fondo partes de la letra. Suena bien, pero la verdad no es lo mismo.
Uno al conocerme pensaría que tal vez me gusta mucho y no tendría motivos para irme, y menos a una TUNA.
Una TUNA es un coro parecido a una estudiantina, de hecho no tengo bien una idea de que es una estudiantina, pero sé que son parecidas. Aca se canta musica española, mexicana y latina en general. Pues resulta que me salí del coro para entrar a la tuna.
Desde un principio noté la diferencia, o mas bien me la hicieron notar. En Ars iovialis yo era bajo (voz grave de los hombres), pero eso era por que en realidad no tienen bajos (los bajos son algo muuuuuuuy raro en México por nuestra fisionomía) tan sólo ponen ahí a los varítonos (voz intermedia de los hombres). En la Tuna si tienen un bajo y yo nunca llegaría a poder cantar tan grave como él.
Ars iovialis resulto ser muy rigido en su forma de cantar: desde la vestimenta o que estamos fijos en un lugar al cantar, hasta el volumen en que cantas (a mi me pasaba que tenia que bajar mi volumen por no tapar a las sopranos, voz aguda de las mujeres). Aca en la tuna el escenario esta siempre a tu disposición, lo puedes recorrer, caminar, la cosa es que no estés rigido.
Y tal vez lo mas notorio, resulta que soy Tenor "dramatico", lo que significa que mi voz suena muy fuerte. No habia forma de enterarce de ello en Ars iovialis por que nunca podia cantar "natural" sino mas bien tenia que "educar mi voz".

Hay mas que me gustaría platicar sobre la tuna, pero esto se esta alargando y ustedes artando. Algun día espero que me vayan a oir.

3 comentarios:

Salvador dijo...

Eeeeeehhh!!!
Me encanta el "con el pim piririm pim pim, con el pom pororom pom pom..."
Y tú frase de hace algunos post acerca de los astrónomos y los astronautas se me hizo genial. Rocks!

LaJuSa dijo...

Ash ps q mal q ia no stés en Ars Iovialis xq vives en mixcoac tbn :P y ps io akabo de entrar al coro y no hay nunka nadie con kien irme... jajá perdon x ser tan metiche y comentar en tu blog algo tan tonto :P

Saludos!

Gabriel Alz dijo...

No hay metiches cuando se trata de un blog. Y menos cuando es uno tan chafa como el mio.

Tu motivo de escribir está bien chido, je je.

Hace poco fui a un concierto de Ars Iovialis y me dió mucha nostalgia. Oscar Herrera es una gran persona y sólo por él vale la pena el coro.
Lastima que sea él mismo el que lo mantiene con esa escencia tan seria que fue la que a mi me aburrió. Les pone música muy clásica y luego les pide bailar y sonreir, pues claro que no lo van a hacer.

No manches, en mi época las mujeres íban con pantalon negro y blusa blanca. Ahora, se mandaron hacer un vastido color guinda que estaría mas o menos si lo hiciera un sastre de verdad, pero como no, pues parece que llevan un vestido de quince años adaptado para un funeral, iak!